Con el progreso de las técnicas de diálisis, las complicaciones de la
hemodiálisis reducen gradualmente. Pero aún así una parte de los pacientes
podría tener algunas molestias durante o después de la diálisis.
Los más comunes incluyen: debilidad, fatiga, dolor de cabeza, náuseas, vómito
y espasmos musculares. Estos síntomas se deben principalmente a los rápidos
cambios en los fluidos extracelulares, las cuales se pueden aliviar en gran
medida por el buen manejo de la dieta y el peso, así como el volumen de
ultrafiltración.
Como resultado de la hipertensión, la malnutrición, anemia, corazón y
hidropericardio ampliada, algunos pacientes pueden presentar hipertensión,
hipotensión, dolor de pecho, arritmia y otros síntomas, que se pueden mejorar
significativamente después de un período de tratamiento.
Los pacientes con hipertensión deben usar los antihipertensivos con la
orientación de los médicos, controlar su peso y comer alimentos ligeros.
Pocos pacientes tendrían respuestas hipersensibles o chile transitoria y la
fiebre la primera vez que utilizan dializador. Estos síntomas podrían ser
abordados por el personal médico, mientras que la mayoría de los pacientes no
presentaría ninguna molestia.
La hipotensión es también un fenómeno común, que es más probable que suceda a
las personas mayores con bajo peso, para los cuales la velocidad rápida
deshidratación, la desnutrición a largo plazo, la mala función cardiaca,
trastorno funcional del sistema nervioso vegetativo podrían ser responsables.
Aquellos cuya repetición de esta condición debe disminuir el aumento de su peso
entre la diálisis y reducir o abstenerse ingesta de alimentos durante la
diálisis.
Si tiene alguna pregunta, no dude en ponerse en contacto con nuestros
expertos en línea que están dispuestos a darle consejos sobre su tratamiento en
función de sus condiciones específicas.
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